:;4 R Tí VIST A DE LA SOCIEDAD ECONÓMICA DE SANTIAGO- do; ora removiendo b'.-s hojas secas que han cegado un manauíial; or¡^ por último construyendo .una barrera rústica para contener las aveioidüs originadas por las aguas pluviales. Un buen culüvador tiene que poner á contribución su celo á todas horas y á todos momeníos; porqu-í el os er. doñnitiva la segunda providencia de lot^ bosques. ¡Onan variados son, con efecto, los trabajos de conservación y nsiduos cuidados que demanda un simple soto! A los ya enumerados hay q-ue añadir la poda de los resalvos, la limpia de la* ramas tragonas que, desplazando la savia, provocan la muerte de los árboles, la vigilancia do los lindes de las fincas que ?e oscurecen y pierden con frecuencia por incuria y abandono, la reparación de los caminos, la dirección de la poda, los enrarecimientos, las escardaduras di la tierra y todo lo que lia dado en llamarse cortes de mejoramiento. Nunca se en arecorán lo bastante estos cuidados á los pr jpictarios, Por medio del sistema cultural enunciado es como, descabezando á los plantones do los obstáculos que empecen á su desarrollo, se da un avance saludable á los bos jues; tornándolos mas amplios y menos espesos, 6 impidiendo pao mueran los primeros. Merced á cstoí eurarocimicntos, los plantones recibiendo con abundancia el aire, la mz, y el acido carbónico que los vivifican, prosperarán con mas rapidez; dando á la corta ó á la larga un producto que el propietario espera siempre c.n impaciencia. Deben asimismo consagrarse análogos cuidados á los pinares Las ramas laterales, si bien producen las resinas, dejan, después de la explotación do estas ultimas, nudos que facilitan la descomposición de las maderas y disminuyen su duración. Para obviar este inconveniente basta sacar con la mano los botones ó yemas que rodean al vastago. Mas do'' e tenerse en cuenta que este procedimiento solo es fructí-fero cuando se practica mas de una vez y so continua hasta llegar á la copa del árbol, cuyo crecimiento será, por este medio, mas rápido y cuya explotación será á la par mas fácil. Se suprimen asi las interrupciones entre los vastagos sucesivos y se prolonga la duración de la madera. El cultivador tiene que construir ademas , fosos de saneamiento y entretenerlos. Hasta I aquí no han comprendido los particulares ¡ ol inmenso interés que les habrá do reportar ; el saneamiento de los bosques. La solución do este problema entraña un punto de vista de bienestar general, porque las lagunas y pantanos son focos de miasmas y causa por ende de enfermedades palúdicas. Por otra parte las aguas que fluyen de estos lugares poblados de hierbas crecidas y juncos son mas bien nocivas que útiles á la agricultura por su acritud persistente. Por medio del drenage se logrará "poblar lugares estancados, con robles, hayas y otros arboles que contienen madera de construcción, si se deciden los propietarios á hacer un gasto de 2-000 reales por hectárea. El capitalista habrá hecho asi una operación, de crecido interés y habrá prestado á la salubridad pública un señalado servicio. Solo, merced á estos procedimientos, podremos conservar la riqueza forestal que aun queda en Galicia y fomentar y perfeccionar la que se cree' en el porvenir no lejano en que, variando de derroteros nuestra producción agrícola con la terminación de las vias férreas que han de ponernos en comunicación con el resto de Kspaín, tengamos precisión de sustituir unas producciones por otras. Josü A. Parca y oanjuiuo. SECCION OFICIAL. Extracto ríe la .sesión extraordinaria celebradla el 28 de Noviembre de 1881, iwa la elección de oficiales bajo la presidencia del Il/istrisimo Sr. D, Salvador Parga Torrelro, Director. Abierta la sesión, se dio lectura por el Secretario á los artículos 10 y 17 del título 5.°; á los 4 del título 6.° y al 5.° del título 1." de los Estatutos de la Sociedad relativos á la elección de cargos. Procedióse en seguida á la votación terminada la cual y hecho el escrutinio resultaron clejidosy fueron proclamados; Director, Illmo. Sr. D. Salvador Parga Torreiro Vice-Dírector, Sr. D. José López de Amarante.— Censor, Sr. D. Vicente Martínez de la Kiva — Vice-Censor, Sr. D. Bernardo Pórtela Pérez— Contador, Sr. D. Manuel Martínez Eernande/..— Vice-Contador, Sr. D. Ventura Villar.— Archivero, Sr. D. Felipe Gutiérrez de la Peña y Tostado — Vice~Archivero,_ Señor D. Juan Barcia Caballero,— Depositario, Señor 1). Alfredo do Andrés Moreno y García. — Vicesecretario, Sr. D. Angel Martínez de la Kiva y Vi lar. El Sr. Parga y los demás señores reelegidos presentes expresaron su reconocimieuto por