S u e v i a Fu ndadores: CAR BAL LA L y SOLLOSO I Revista ilustrada PRESENTADA EN EA ADMINISTRACION DE CORREOS COMO CORRESPONDENCIA DE SEGUNDA CEASE Propietario: EMILIO EYMIL AL LECTOR 5UEVIA, después de haber suspendido su publicación por ausencia de nuestro Director, reaparece diáfana, briosa y llena de vida como nunca. Bn esta segunda etapa, surge á la luz contando con talleres tipográficos propios, donde se observará la más rigurosa estética en su confección, pues cuenta para ello con los materiales más modernos en la tipografía. Esto en cuanto á lo artístico, pues en lo que respecta al texto, contamos para próximos números con valiosa colaboración de firmas gallegas que iremos publicando para honra de SuEViA y para recreo y satisfacción de nuestros asiduos lectores. Conste, que no se trata de uno de tantos ofrecimientos de ritual y sí de una realidad muy próxima. En el programa de SuEViA, se ha prescindido por completo del verbo «ofrecer», haciendo, en cambio, grande acopio del verbo «publicar», Y, tocante al patrón ó norma que se ha de observar en la columnas de SuEViA, redúcese, explícitamente, á información literaria y gráfica, social ó colectiva de nuestra colonia, }' de cuanto de interés acaezca en nuestra lejana patria. La información colectiva de nuestra colonia, harto sabido tenemos que es un punto bastante delicado de tratar, y en el cual hay que andar, como vulgarmente se dice, «con pies de plomo». Nuestra información colectiva, aun después de cerciorarnos debidamente de su veracidad, la expondremos desnuda tal cual sea, sencilla y expresiva; los trapos ó los encajes con que pueda vestirse, lo dejamos á la libre elección de nuestros lectores. Eos comentarios nos horrorizan, y, no sólo nos horrorizan, sino que hasta podrían perjudicarnos. Estos comentarios, haciéndolos nosotros, producen el mismo efecto en la opinión de nuestros conterráneos que el que produce la prensa diaria entre propietarios y albañiles, cuando informa el pase de un ciclón por la ciudad el día antes, con sus correspondientes destrozos en las propiedades urbanas; á los albañiles les agrada, pero á los propietarios... ¡qué les va á agradar! Y nosotros, procediendo con gran tacto al conocer como conocemos á fondo el sinnúmero de triquiñuelas y susceptibilidades de nuestra numerosa colonia, nos decididimos á optar por la información á secas. Resumiendo, que vendrá á ser algo así, — y valga el símil — como el diario cañonazo de las nueve en esta ciudad. Al que tenga reloj, le servirá indudablemente de aviso para ponerlo en hora. Al que no lo tenga, nunca le estará de más el enterarse por medio tan cómodo y sencillo, de poder saber la hora en que vive. He aquí nuestro programa. La Redacción. * * * ❖ SAVONAROLA A MANOLO SÁNCHEZ Cambead'o pobo do Duomo, indino seus fanatismos embruxado verra na praza qu'o Palazzo Vecchio cerra, ant'a forca do frade florentino. Ksquencend'o saqueo de Volterra, na fogueira qn'encende Ramolino a- o arroxar o cadavre, é asesino das libertades da süa propia térra. O Cristo da Edá Media foi queimadq: a negra intransixencia do Papado" as suas cinzas sobr'o Arno aventa roubando á humanidá santo tesouro; m ais, sen esprito n-unha frase a!enta: «Cálices de madeira é Bispos d'ouro.» ■r, CABANILLAS.